Martes 24 de Noviembre de 2015
Hace cien años Albert Einstein publicó su teoría de la relatividad general, uno de los logros científicos más importantes del siglo pasado. Un resultado clave de la teoría de Einstein es que la materia deforma el espacio-tiempo, y por lo tanto un objeto masivo puede causar una flexión observable de luz de un objeto más lejano. El primer éxito de la teoría fue que durante la observación de un Eclipse de Sol, la luz de una estrella lejana del fondo fue desviada por la gravedad al pasar cerca del Sol. Los astrónomos ya han encontrado muchos ejemplos de este fenómeno, conocido como lente gravitacional. Más que una ilusión cósmica, las lentes gravitacionales proporcionan a los astrónomos una forma de sondeo de galaxias y grupos de galaxias extremadamente distantes que de otro modo sería imposible observar, incluso con los telescopios más potentes. Los últimos resultados del Gato de Cheshire, un grupo de galaxias que con la teoría de Einstein pueden dar lugar a nuevos descubrimientos en la actualidad. Los astrónomos han bautizadoa éste grupo de galaxias con ese nombre debido al parecido con un gato sonriente. Algunos de los rasgos felinos son en realidad son galaxias distantes cuya luz se ha estirado y doblado por las grandes cantidades de masa que atraviesa nuestra visión, la mayoría de ésta masa está en forma de materia oscura detectable sólo a través de su efecto gravitacional, que se encuentra en el sistema. Más específicamente, la masa que distorsiona la luz galáctica lejana se encuentra en torno a las dos galaxias gigantes, el ojo del gato y otra galaxia, la nariz del gato. Los múltiples arcos circulares de la cara del gato surgen de la lente gravitacional de cuatro diferentes galaxias de fondo atravesando las galaxias en primer plano, los ojos del gato.
Las galaxias individuales del sistema, así como los arcos vistos a través de las lentes gravitacionales, se ven en la luz óptica del Telescopio Espacial Hubble. Cada galaxia de los ojos del gato, es el miembro más brillante de su propio grupo de galaxias y estos dos grupos se están aproximándo a más de 300.000 millas por hora. Los datos del Observatorio de Rayos X Chandra, en color púrpura, muestran el gas que se ha calentado a millones de grados, lo cual es evidencia de que los grupos de galaxias están chocando los unos contra los otros. Datos de rayos X de Chandra revelan también que a la izquierda del grupo del gato de Cheshire, existe un agujero negro supermasivo alimentándose activamente en el centro de la galaxia. Los astrónomos creen que el grupo del gato de Cheshire se convertirá en lo que se conoce como un grupo fósil, que se define como una reunión de galaxias que contiene una galaxia elíptica gigante y otras más débiles mucho más pequeñas. Los grupos fósiles pueden representar una etapa temporal que casi todos los grupos de galaxias atraviesan en algún momento de su evolución. Por lo tanto, los astrónomos están deseosos de comprender mejor las propiedades y el comportamiento de estos grupos. El gato de Cheshire representa la primera oportunidad para que los astrónomos estudien un progenitor de grupo fósil. Los astrónomos estiman que los dos ojos del gato se fusionarán en unos mil millones de años, dejando una gran galaxia y docenas de otras mucho más pequeñas en un grupo combinado. En ese momento se habrá convertido en un grupo de fósiles cuyo nombre más apropiado puede ser el grupo Cyclops.