Lunes 17 de Mayo de 2021
El indiscreto ojo del Telescopio Espacial Hubble lo capta todo, ó casi todo. La Galaxia UGC 12682 brilla contra el oscuro telón de fondo del Universo a unos 70 millones de años luz de la Vía Láctea en la Constelación de Pegasus. A esta distancia es imposible escapar del poder del Hubble, que ya ha visto la luz de objetos situados al 95% de la distancia que nos separa del Big Bang. La extraña y desordenada estructura de UGC 12682, contiene focos brillantes de formación estelar. En noviembre de 2008, Caroline Moore de 14 años de Nueva York, descubrió una supernova en UGC 12682. Esto la convirtió en la persona más joven en ese momento en haber descubierto una supernova. Las observaciones de seguimiento realizadas por los astrónomos profesionales de la supernova catalogada como SN 2008ha, mostraron que era particularmente interesante en varios aspectos, su galaxia anfitriona rara vez produce supernovas. Pero además se trata de una de las supernovas más débiles jamás observadas, tras la explosión se expandió muy lentamente, lo que sugiere que la explosión no liberó grandes cantidades de energía como se espera de un evento de este tipo. Los astrónomos ahora han clasificado a SN 2008ha como una subclase de una supernova de tipo Ia, que se produce cuando una enana blanca extrae con avidez la materia de una estrella compañera. SN 2008ha puede haber sido el resultado de una supernova parcialmente fallida, lo que explica porqué la explosión no pudo destruir toda la estrella. En ésta imagen el norte está 154,9° a la derecha de la vertical.