Martes 10 de Noviembre de 2020
La habilidad de Tony y Daphne Hallas para crear imágenes astronómicas espectaculares es impresionante. La escena, aunque no lo parezca, se desarrolla en el planeta Tierra, concretamente en el estado de California, Estados Unidos. El lugar llamado Mono Lake, evoca un paisaje subrealista que bién podría ser de otro planeta. Miramos a traves de telescopios observando infinidad de eventos cósmicos de formas y colores increíbles, y sin embargo en la Tierra también tenemos lugares mágicos que deslumbran nuestra mirada y son geológicamente interesantes, que además suelen esconder dramáticas historias. En éste caso se trata de un lago grande y poco profundo compuesto de soda salina. Se formó hace unos 760.000 años como lago terminal de una cuenca endorreica, lo que quiere decir que no tiene salida al mar, contiene un alto nivel de arsénico y de sales que se han acumulado con el paso del tiempo, y esto hace que el agua del lago sea alcalina. Este lago tiene un ecosistema extraordinariamente productivo basado en el crustáceo del género artemia que prospera en sus aguas, y la mosca alcalina, que producen un hábitat ideal para la anidación de dos millones de aves migratorias anuales. La base de la alimentación de estas dos especies es una pequeña alga que se reproduce por escisión. La NASA identificó en el lago una bacteria llamada GFAJ-1, de la clase Gammaproteobacteria, cuya dieta es pobre en fósforo y rica en arsénico. Es un descubrimiento de gran interés científico, ya que es el primer organismo conocido que puede construir sus componentes celulares utilizando un químico venenoso para cualquier otro. La historia humana de Mono Lake se asocia con su ecosistema productivo, los nativos Kutzadika'a basaban su nutrición en las larvas de las moscas alcalinas que habitan en el lago. En el cielo, el cometa Hale-Bopp luce imponente, tal como se veía en 1997 cuando cruzaba nuestros cielos y era incluso visible de día sin ayuda óptica.
Catalogado como C/1995 O1 (Hale Bopp), fue probablemente uno de los cometas más ampliamente observados en el siglo XX y uno de los más brillantes que se han visto en décadas. Pudo ser contemplado a simple vista durante 18 meses, casi el doble del tiempo que pudo observarse el Gran Cometa de 1811. El cometa Hale-Bopp fue descubierto el 23 de julio de 1995 a gran distancia del Sol, creándose desde entonces la expectativa de que sería un cometa muy brillante cuando pasara cerca de la Tierra. El brillo de un cometa es algo muy difícil de predecir con exactitud, pero el Hale-Bopp superó todo lo esperado cuando pasó por su perihelio el 1 de abril de 1997, siendo bautizado como el Gran Cometa de 1997. Pronto quedó claro que Hale-Bopp no era un cometa corriente, al calcular su órbita, resultó estar a 7,2 unidades astronómicas UA del Sol, colocándose entre Júpiter y Saturno, a la mayor distancia de la Tierra que cualquier otro cometa descubierto. La mayoría de los cometas a esta distancia son apenas perceptibles, y su actividad no es apreciable, pero la cola del Hale-Bopp era observable. En una imagen del Telescopio anglo-australiano en 1993, se encontró el cometa todavía no descubierto a 13 UA del Sol, que es una distancia que en general no permite observar cometas; por ejemplo, el cometa 1P/Halley fue 50.000 veces menos luminoso a la misma distancia del Sol. Se han hecho varias estimaciones del tamaño del núcleo del cometa, las cuales van desde los 15 km, estimación realizada por el astrónomo Zdeněk Sekanina, hasta los 40 km, medida derivada de las observaciones del elescopio Espacial Hubble. El primero pondría al cometa en la clase de cometas grandes mientras que la segunda lo haría dentro de los gigantes y significaría que tiene un diámetro un 50 % mayor que el del Halley.
