Viernes 3 de Enero de 2020
En la noche del 20 de febrero de 1996, el astrónomo independiente japonés Yukio Sakurai estaba haciendo algo que en lo que había demostrado ser excepcionalmente bueno, buscar supernovas en el cielo. Cuando se concentró con V4334 Sagittarii, una estrella localizada en la Constelación de Sagitarius ó Arquero, vio algo muy extraño, algo que él y otros astrónomos han estado persiguiendo a través de los años. La resurrección de una estrella muerta. La estrella no es la brillante azul de la imagen, sino que ha creado la nova roja en forma de anillo, cuya estrella progenitora debe encontrarse en el centro de la nube. El descubrimiento de Sakurai resultó ser mucho más interesante que la supernova que inicialmente parecía ser. En realidad, el objeto es una pequeña estrella enana blanca que está experimentando un flash del helio.
Es uno de los escasos eventos de este tipo presenciado por astrónomos. Normalmente, la fase de enana blanca es la última del ciclo de la vida de una estrella de baja masa. En algunos casos sin embargo, la estrella se reenciende con un flash del helio y se expande para volver a la fase de gigante roja, expulsando grandes cantidades de gas y polvo en el proceso, antes de volver a encogerse y convertirse de nuevo en una enana blanca. Es una serie de acontecimientos espectaculares y de corta duración, y V4334 Sagittarii ha ofrecido a los astrónomos una oportunidad única para estudiar este evento en tiempo real. La enana blanca emite suficiente radiación ultravioleta como para iluminar el gas que ha expulsado, el cual sólo puede verse en esta imagen como un anillo de material rojo. Esta imagen fue tomada utilizando el instrumento FORS, instalado en el Very Large Telescope.
Fotografía Original
Crédito: ESO
Nombre | RA | DEC | Magnitud | Datos |
V4334 Sagittarii | 17:52:32.69 | -17º 41' 08.0'' | B = 12.01 | Simbad |