Viernes 16 de Septiembre de 2016
IC 349 fue descubierta por primera vez por el astrónomo estadounidense Edward Emerson Barnard en 1890. Observando a través del telescopio de 36 pulgadas del Observatorio Lick, Barnard notó una pequeña nebulosa intensamente brillante inmediatamente adyacente a la brillante estrella Merope, situada en el centro de esta imagen. La nebulosa ahora lleva su nombre. IC 349 es muy brillante debido a su extrema proximidad a la estrella Merope. Se encuentra a solo 0,06 años luz de la estrella, lo que supone una separación equivalente a 3.500 veces la distancia de la Tierra al Sol. El Telescopio Espacial Hubble ha tomado una imagen a color de alta resolución que muestra en IC 349 zarcillos extraños que parecen viajar hacia la estrella.
Los astrónomos creen que los zarcillos son en realidad restos de partículas de mayor tamaño, que debido a su mayor masa tienden a tardar más en ser repelidos por los vientos estelares que las partículas más pequeñas, que constituyen el grueso de la nebulosa. La estrella Merope está situada en el célebre cúmulo abierto de las Pléyades M45, visible a simple vista incluso con la contaminación atmosférica y lumínica de las grandes ciudades. Las nebulosas de reflexión que acompañan a todas las estrellas en M45 son sólo visibles por medio de un telescopio y su forma es esculpida por los vientos estelares de las enormes estrellas que componen las Pléyades.